El Top del Top del Metal (George)

En una de esas conversaciones de media noche, surgió esta idea; armar el top de la vida, los quince discos que nos definen, los quince discos que han forjado nuestro imaginario musical y que revelan lo que somos, de dónde venimos. Es el ejercicio de la nostalgia, regresar a nuestra raíces. Todos tenemos recorridos distintos, pero tenemos esa misma pasión por la música. Tal vez en ese momento formativo no supimos reconocernos, pero aquí estamos en la cofradía del Abismo. 

15. Lo Mejor de Ángeles del Infierno (1987)


   
Yo tengo una larga relación con los Ángeles del Infierno; este fue uno de los primeros cassettes que tuve en mi vida, recuerdo que uno de mis  primos me lo pasó para hacer una copia. Ni sabía el nombre de las canciones, las supe mucho después; en ese entonces era un poco más difícil conseguir música. Este es un disco que me acompañó gran parte de mi adolescencia. Hace tiempo que lo dejé de escuchar pero no puedo negar su impacto; lo recuerdo con mucha nostalgia.   

14. Altar of Madness – Morbid Angel (1989)


Es el regreso a los orígenes; este disco me pareció la cosa más violenta y salvaje del momento. Con este disco comenzó mi interés por el metal extremo. Claro después me fui por otro lado, me junté con los hippies y comencé a escuchar otras cosas. Algunos años después, cuando lo desempolvé volví a sentir lo mismo: esta brutalidad, es lo mío; es la ira que yo también siento. Es un despliegue de odio y es lo que yo necesito para calmar a mis propios demonios. Por eso, el Altar of Madness siempre será uno de mis discos favoritos.  

13. Youthanasia – Megadeth (1994)


Este es el primer disco de Megadeth que he escuchado en mi vida; es bien melódico después de todo. Estaba en mi fase rockera y este disco me entró con todo. Lo sigo escuchando con el mismo entusiasmo; aquí el trabajo vocal es impecable y a parte de Elysian Fields, que me parece bastante aburrida, es un disco genial de principio a fin, el que más me gusta de Megadeth.  

12. Cause of Death – Obituary (1990)


De los primeros discos que compré. En ese entonces yo no sabía del metal y de sus ramificaciones. En realidad compré el disco por la portada, no sabía nada de la banda ni de la música que hacían; fue un golpe tremendo. Las voces guturales, así se tiene que cantar con la garganta rasgada por el dolor, es la voz de la muerte; ahora tolero mal las voces limpias, el metal es la fuerza despiadada, el rostro inicuo de la humanidad. Todavía me sigue gustando Obituary y John Tardy es uno de los mejores vocalistas del género. 

11. Deicide (1990) 


Un amigo me prestó este disco y aquí comienza mi larga y a veces conflictiva relación con el metal. Me obsesioné con este disco, también me lo compré, luego lo perdí o se lo regalé a no sé quién, no lo recuerdo muy bien. Fue la primera polera que me compré; asumía discretamente mi identidad como metalero, tenía 12 años por cierto (por lo menos eso es lo que creo). Después llegó todo mi delirio hippie revolucionario y me olvidé de Deicide. Muchos años después lo volví a encontrar, sigo pensado que es un hito del metal, cambia un paradigma; cuando menos esa es mi impresión. 

10. Ride the Lightning – Metallica (1984) 


Tenía once años cuando salió el Black Album y es un disco que generó una conmoción enorme; el impacto que tuvo es pues considerable y trasciende las generaciones. En ese momento me estaba interesando por el rock, el salto hacia el metal era algo natural. Uno de mis primos ya tenía la colección de Metallica, me prestó los discos y hasta el día de hoy sigo pensado que el Ride the Lightning es el mejor. De lejos es el que más escucho, me llega al alma y es una pena que Metallica haya hecho tanta porquería; fue una de las bandas más grandiosas de su generación, ahora es sólo un recuerdo.

9. South of Heaven – Slayer (1988)


A Slayer yo le entré con este disco; la canción epónima es una de las que más escuchó, es de mis favoritas de toda la vida. De las Big 4, Slayer es la más brutal y por eso me gusta. Esos riff; es de lo mejor del metal y la batería del Lombardo hace la diferencia con cualquiera de las bandas de su generación. 

8. Blackwater Park – Opeth (2001)


Con este disco yo me volví fan de Opeth; lo descubrí hace unos diez años, justo cuando estaba volviendo al metal. Bleak se ha convertido en una de mis canciones favoritas, siempre la voy a escuchar con la misma emoción, me encanta el trabajo vocal; el disco en sí es extraordinario, de lo mejor de la música en general. Seas metalero o no Opeth lo cambió todo, es innegable. Es una de las bandas más influyentes hoy en día y de las mejores bandas de todos los tiempos.   

7. Beneath the Remains – Sepultura (1989)


También es de los primeros discos que compré; a principios de los 90 Sepultura era la banda. Este disco junto con el Arise y el Chaos A.D., son el soundtrack de mi adolescencia. Después Sepultura se fue al diablo; ahora es otra banda, sus últimos discos son buenos pero están ya muy lejos del Beneath the Remains; nunca me acostumbré a la voz de Derrick Green y Soulfly me deja bastante indiferente, pero los Cavalera Conspiracy tiene algo del Sepultura de antaño.  

6. Heaven & Hell – Black Sabbath (1980)


 
Todos los metaleros del mundo le rinden culto a Black Sabbath, es la banda que lo inició todo; pero casi todos olvidan que la banda tiene una historia más allá del Ozzy. Este disco me llega al corazón; es una pena a que esta formación no haya durado, podían haber dominado los 80. Sabbath es una banda muy errática pero sigo pensado que podían haber conquistado el mundo con Dio frente al micrófono.     

5. No Sleep’til Hammersmith – Motörhead (1981) 


Con este disco me volví fan incondicional de Motörhead; es una brutalidad que me deja atónito, es el testimonio de una banda en la cúspide de su carrera. Me sigue impresionando lo ruidosos que son. Aquí termina la edad de oro de Motörhead que coincide con el despertar del metal en sí, ese sonido agresivo e inclemente que encuentra gran parte de sus rudimentos en la batería frenética del Taylor, la velocidad Clark y la voz casi gutural del Lemmy. Y después de tantos años, la banda sigue ahí, sacando discos, saliendo de gira y lo seguirá haciendo mientras el Lemmy tenga la fuerza de salir al escenario.Realmente un disco excepcional.

4. Live After Death – Iron Maiden (1985)


Con Maiden tengo una relación complicada, sigo detestando canciones como Run to the Hills o Can I Play with Madness y todo lo que ha hecho Maiden después del Powerslave no me termina de convencer. Por eso el Live After Death gravado en el pináculo de su carrera, es sin duda el disco que más escucho, el set-list me parece perfecto. Lo que siempre me gustó en Maiden es la idea de las dos guitarras, los solos que se intercalan, es el equilibrio perfecto entre los solistas, el vocalista y la sección rítmica. Es lo mejor de los 80, ninguna banda estaba a ese nivel. Los Maiden tienen su propia categoría en la historia del metal.      

3. If You Want Blood (You’ve Got It) – AC/DC (1978)


El primer cassette que compré, con el poco dinero que pude ahorrar, fue el Live de AC/DC; desde entonces es la banda que me acompañado en casi todas mis borracheras de juventud. Es música para animar fiestas. La etapa Scott la descubrí después y este disco me dejó deslumbrado, aquí Scott canta con una fuerza pocas veces igualada; canta con convicción. También cierra una etapa, después viene un AC/DC más producido, más trabajado; aquí todavía es una banda de pub, más sincera y real. Desbordan de energía y me parece increíble que a sus años sigan llenando estadios. Siempre será una de mis bandas favoritas pues escucharlos me pone de buen humor. 

2. Alive ! – Kiss (1975)


Como olvidarlo, mi padre hizo un viaje a los Estados Unidos en 1990 y al volver me trajo tres discos de Kiss, el Alive, el Dynasty y el Double Platinum. En mi caso aquí se define todo; con el Alive me volví rockero y fan incondicional de Kiss; fue mi primera gran obsesión: el maquillaje, los trajes, el hecho que todos los miembros de la banda canten, los efectos especiales; realmente la banda tenía todo para cautivarme. Desde entonces han surgido otras cosas, he visto a otras bandas, he explorado otros géneros y Kiss me ha decepcionado en más de una ocasión, pero al Alive lo sigo escuchando y así los seguiré haciendo porque es el sonido que estaba buscando, es lo que me hacía falta en la vida. 

1. Made in Japan – Deep Purple (1972)  


Pero si un disco define realmente lo que soy, lo que me gusta en la música y lo que siempre busco, es el Made in Japan. Entre los vinilos de mi padre encontré el Stormbringer, el Come Taste the Band, el Machine Head y este disco. Deep Purple es mi banda, es una constante en mi vida, ni mis relaciones amorosas han durado tanto. Es pura y simple devoción. Una banda en la cumbre de su carrera; lo recuerdo muy bien, quedé tan impacto cuando escuché Space Truckin’, jamás había escuchado una canción tan larga, veinte minutos de violencia pura. Ninguna banda se acerca a los Purple, ese equilibrio entre los teclados y la guitarra, la voz inverosímil de Ian Gillan, la batería de Paice. Fue la combinación perfecta, la banda más ruidosa del planeta.   

Sobre George

Politólogo, melómano, escritor...

4 comentarios

  1. Muy buena lista querido George!! llena de grandes y fundamentales bandas, de la puta, estuvo muy bueno hacer este ejercicio!!Un fuerte abrazo

  2. Buena lista George!!!Como les decía. Coincidimos en las bandas, los discos son más personales.Y de tu lista, igual, grandes bandas, Morbid, Deicide (para mi el Among Feasting the beast) o Sepultura (ahí elegiría el Schizophrenia)!!!Y coincidimos en Maiden… Maravilla de disco el Live after death!!!Un abrazo

  3. Gracias mis estimados, realmente fue una linda experiencia; coincidimos no más en muchas cosas…

  4. George… que buenisimo Top sobre todo porq me recuerda algo que lei en tu publicacion… algo asi que esto refleja quienes somos o donde apuntamos…un abrazo.

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